domingo, 13 de enero de 2013

Desaparición forzada, uno de los más lacerantes actos contra la dignidad humana.


El 21 de diciembre de 2010, la Asamblea General de las Naciones Unidas, expresó su preocupación por el aumento de las desapariciones forzadas o involuntarias en diversas regiones del mundo y determinó establecer el 30 de agosto, como Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas preocupación a la que sin duda, nuestro país abonó por las condiciones de inseguridad y violencia generalizada que han llevado en vastas zonas de la República Mexicana, a la ejecución de más de 80 mil personas y a la desaparición forzada, sin contar con información precisa, de un aproximado de 20 mil personas.

Para la gente que tenemos como profesión la defensa de los derechos humanos, preguntas como ¿cuántas son?, ¿quienes son y porqué no están?, ¿qué han hecho las autoridades para esclarecer estas desapariciones forzadas? ¿Cual ha sido la atención proporcionada a las familias de las personas desaparecidas?, han sido repetidas, exigidas y litigadas hasta el cansancio ante todas las autoridades “competentes” para que respondan con el esclarecimiento de estas desapariciones forzadas, homicidios y feminicidos generalizados.

En 2011, a raíz del surgimiento del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD), encabezado por el poeta Javier Sicilia, la sociedad pudo escuchar el grito desesperado de miles y miles de personas exigiendo justicia por sus muertos, por conocer el paradero de sus seres queridos desaparecidos por la delincuencia organizada, pero también en múltiples casos, por las propias fuerzas armadas y del orden público. En aquellos meses, como un miembro más de la sociedad, tuve la oportunidad de sumarme a la indignación de las voces que exigían a las autoridades federales y estatales, el cese a la estrategia fallida de la guerra contra el narcotráfico emprendida por el gobierno de Felipe Calderón.

Como integrante del Movimiento durante el año 2011, caminé junto a Javier Sicilia y cientos de víctimas en algunas etapas de las caravanas que emprendieron al norte y sur del país, donde fui testigo del desgarrador dolor e impotencia que viven todos los días y noches, los familiares de las víctimas de la violencia y de violaciones a sus derechos humanos. Asistí a múltiples reuniones con las autoridades federales como la PGR, Províctima, Secretaría de Gobernación, la SEDENA e incluso Presidencia de la República sin haber logrado encontrar siquiera a una de las personas desaparecidas. Igualmente, acompañé representaciones del Movimiento ante gobiernos estatales como el de Nuevo León, Estado que ahora es tristemente reconocido por el hedor de la muerte de sus municipios y de su capital Monterrey, donde por supuesto, tampoco hubo resultados satisfactorios.

Ante estos hechos tan graves, pienso que a nuestra sociedad mexicana le hace falta reconocer un hecho. Somos una sociedad altamente discriminadora que hasta en estos niveles de emergencia nacional, consideramos que la gente muerta y/o desaparecida, se encuentra en esa situación por su “probable relación con la delincuencia”, es decir, caemos en la fácil estigmatización de la criminalización hacia estos sectores sociales que por lo general, son los menos favorecidos económicamente. Cuanta insensibilidad y discriminación social representa la frase “déjenlos que se maten entre ellos”.

Nuestra falta de solidaridad y de indignación por la ola de muerte y de desapariciones forzadas que invade al país, evidencia también la discriminación proveniente de las autoridades responsables de investigar y hacer justicia, quienes tratan con desdén y menosprecio a las familias que acuden a pedir información y apoyo estatal para ubicar a su familiar desaparecido. Ahora, con la publicación de la Ley General de Víctimas, la sociedad encuentra una nueva oportunidad de encontrar certeza en las investigaciones de búsqueda de sus desaparecidos, así como el obligado apoyo que tendrán que dar las diferentes instancias de todos los niveles de gobierno.

Citando al Maestro Emilio Álvarez Icaza, pieza clave en su momento del MPJD y ahora Secretario Ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), las autoridades del país deben ser las primeras en encabezar la indignación ante la violencia y las violaciones a los derechos humanos, así como para proponer estrategias encaminadas a recomponer el fragmentado tejido social.
 
Como ciudadanos y ciudadanas, nos corresponde exigir y vigilar el aterrizaje y puesta en práctica de la Ley General de Víctimas y dar seguimiento a las siguientes acciones:
 
  • Creación del Sistema Nacional de Víctimas, que establecerá y supervisará los programas y las acciones para apoyar a las víctimas en los tres niveles de gobierno.
  • Conformación de la Comisión Ejecutiva de Atención a las Víctimas, como órgano vigilante y de control de la ley, en donde tendrán participación representantes de las víctimas y de las organizaciones de la sociedad civil.
  • Conformación de un  órgano de Asesoría Jurídica de Atención a Víctimas, dependiente de la Comisión Ejecutiva, a efecto de que las personas afectadas cuenten con representación legal ante las instancias competentes.
  • Creación del Registro Nacional de Víctimas, con el objeto de facilitar el acceso a la ayuda contemplada en la ley.
  • Conformación de un Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, como responsable de proporcionar los recursos necesarios en apoyo a las víctimas.
Sin duda hay mucho trecho por recorrer, el día de hoy, la periodista San Juana Martínez publicó en el diario La Jornada, el calvario que han sufrido 21 familias del Municipio de San de la Paz, Guanajuato, víctimas de la desaparición de 21 hombres que se dirigían en marzo de 2011, hacia los Estados Unidos para trabajar que y que tuvieron la desgracia de cruzar su camino por San Fernando Tamaulipas donde fueron vistos por última vez y en donde se encontró en abril de ese año, 193 cadáveres en una fosa clandestina.
 
Hasta hoy, estas víctimas siguen sin recibir justicia y sin ser escuchadas y atendidas por las autoridades municipales, estatales y federales. Por ello, urge en México que la sociedad civil organizada demande al Estado el cumplimiento y aplicación de esta importante ley, porque de lo contrario, muy pronto todos estos casos podrán caer en el olvido y junto con ello, la esperanza de miles de familias en el país.
 

martes, 1 de enero de 2013

Propósitos y deseos 2013



 
No cabe duda que la formación de hábitos es uno de los temas más complejos que cualquiera de nosotros y nosotras puede enfrentar en la vida. Cuántas veces nos hemos dicho y repetido: "a partir de ahora voy a..."  e imaginamos que con esa simple expresión, nuestra esencia se transformará como por arte de magia y en un parpadear, seremos el tipo de persona que siempre hemos anhelado ser, sin embargo, en cuestión de días o incluso de horas, todos nuestros sueños se derrumban al chocar de frente con la efectividad del viejo refrán más pronto cae un hablador que un cojo.
 
Los propósitos y deseos de fin de año y principio del mismo, siempre han sido una constante para tratar de imaginar la manera en que nos gustaría vivir nuestra existencia y no es malo expresarlos en fechas conmemorativas como las que acabamos de atravesar. El cambio de año puede representar simbólicamente para nuestra vida, la intensión de ser mejores personas o realizar determinadas acciones y por supuesto, ese deseo siempre será bienvenido aquí y en China, así que en lo personal, en esta ocasión compartiré con ustedes un hecho sincero: en lo personal, nunca me he negado a sentir el cosquilleo que provoca la expresión "a partir de ahora voy a...". así que espero al menos por una ocasión, no caer más pronto de lo pensado y cuando menos cumplir de manera efectiva, alguno de los siguientes propósitos para el 2013.
 
Primero. Aún recuerdo el hormigueo en mi estómago cuando me presenté en el salón para realizar el examen de admisión para la Maestría de Derecho en la UNAM. Era una sensación de nervios y al mismo tiempo de emoción. Estudiar un posgrado representaba la oportunidad de ampliar mi formación académica y tener la experiencia de recibir el conocimiento de brillantes profesores y profesoras con amplio reconocimiento y trayectoria. Debo decir que el transcurso de los dos años que duraron los estudios, fueron sumamente interesantes y motivantes académicamente, sin embargo, cuando menos me di cuenta, concluyeron las clases y en un abrir y cerrar de ojos me vi ante el hecho de haber finalizado sin haber concluido debidamente la preparación de mi tesis de grado. Así que mis estimados lectores y lectoras, como podrán suponer, uno de mis principales propósitos de este 2013, será finalizar la tesis y defenderla para obtener el grado de Maestro en Derecho.
 
Segundo.  En el ámbito profesional, comparto que a finales de 2011, tuve la oportunidad de incorporarme al equipo de trabajo del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED), en donde, gracias a la invitación que me extendió la Presidenta Jacqueline L´Hoist, me he desempeñado como Director de Cultura por la No Discriminación. Debo señalar que la experiencia de promover e impulsar la construcción de una cultura de igualdad y no discriminación entre las personas que habitan y transitan en la Ciudad de México, ha sido todo un reto profesional y personal. Afortunadamente, cuento con la colaboración de un equipo profesional que permitió en 2012, la consolidación de proyectos, eventos y atención a la ciudadanía, que harán de este año, una gran responsabilidad y compromiso con la sociedad. Por ello, el propósito de este 2013, será compartir en este espacio, las actividades que realicemos desde el COPRED, para promover y difundir la igualdad y la no discriminación en una sociedad que requiere hoy más que nunca, armonía, integración y paz social. 
 
Tercero. Ejercicio!!! El transcurrir de los años no ha pasado desapercibido en el aspecto físico y a estas alturas de mi vida, debo reconocer que el siguiente refrán: No es lo mismo los tres mosqueteros, que veinte años después, se me aplica a la perfección. Recuerdo con nostalgia las épocas en que vivía para el ejercicio, principalmente para el basquetbol, uno de mis deportes favoritos. En la secundaria, preparatoria e incluso universidad, integrarme a las selecciones escolares siempre fue una constante que me permitió contar con una condición física, digamos decorosa. Este fin de año, para grata sorpresa me han regalado un balón de basquetbol, así que aprovecharé esa "indirecta" y será uno de mis propósitos, regresar a sudar algunos momentos en la cancha que está a un par de calles de mi casa. Si logro combinar ello con un poco de caminadora y abdominales, creo que en un par de meses volveré a estar en condiciones mínimas como para subir dos pisos por las escaleras sin echar medio pulmón por la falta de respiración!!!
 
Cuarto. Escribir en este blog ha sido uno de mis deseos y propósitos constantes desde que lo abrí en 2007. He tenido años buenos, regulares y malos en cuanto a proponer y sugerir material de lectura y de reflexión. He intentado combinarlo con mis diferentes pasiones como el deporte o el acontecer cotidiano del país. Algunas fórmulas me han fallado pero también he tenido pequeños éxitos. El arte de escribir no es una tarea sencilla, hay que entrenar y practicar constantemente para lograr plasmar de manera lógica y secuencial las ideas que se quieren compartir. En el mejor de los casos, para amateurs como yo, la satisfacción de recibir dos o tres comentarios por algún escrito es de gran satisfacción y motivación, así que este año retomaré con ímpetu ese viejo y profundo deseo de escribir y compartir mediante la escritura, una opinión más que trate de invitar al análisis, al diálogo y a un sano intercambio de visiones y formas de pensar.
 
Quinto. Te Latte Café. Para aquellos que me conocen, saben que desde hace casi tres años, junto con mi esposa tenemos una pequeña cafetería en el corazón de la colonia Nápoles en la Ciudad de México. El próximo 11 de enero, será el tercer aniversario de actividades y con la satisfacción de ello comparto con ustedes el hecho de que seguimos a flote y trabajando. Este año será importante consolidar procedimientos y fortalecer algunas acciones para una mejor atención de la gente que nos visita de lunes a sábado.
 
Sexto. Sin duda alguna, no sería nada de lo que soy hoy en día, sin el apoyo de mi familia. Mis padres, mis hermanos y hermanas, mis sobrinos y sobrinas y principalmente mi esposa y mi pequeña hija, han sido uno de los principales motivos que me impulsan día a día a poner el mejor empeño en las cosas que hago. Compartir tiempo de calidad con todas y todos ellos será una mis prioridades para este 2013. Como familia, nos hemos colocado algunos retos con la idea de contribuir a una mejor integración y que al mismo tiempo, nos permitan compartir con aquellos sectores de la sociedad en situación de vulnerabilidad, la solidaridad y acompañamiento a sus propias necesidades. Estoy claro que las comunidades indígeneas de nuestro país nos muestran día con día, ese temple y orgullo de sus raices y por ello, el intercambio de experiencias será una oportunidad para llevar el amor hacia el prójimo que nuestros padres nos han enseñado.
 
Creo que con estos deseos y propósitos para el 2013 será suficiente. Es más, si logro llevar a cabo en un porcentaje razonable cada uno de ellos, marcará una agradable diferencia conmigo mismo y con la gente que me rodea. Como sociedad tenemos mucho por hacer para lograr niveles de convivencia armoniosos y si cada uno de nosotros logra de manera efectiva cumplir sus deseos, seguramente avanzaremos más aprisa en la integración de una comunidad donde se respeten los derechos humanos, la igualdad y sobre todo, abatir el flagelo de la discriminación.
 
Me despido en esta ocasión no sin antes, desear a todas y todos un feliz año 2013, esperando encontrarnos en estos lugares del ciber espacio y mucho mejor aún, frente a frente en el mundo real.
 
Finalmente, comparto con ustedes mi nueva cuenta de twitter @IvanPerezVitela desde donde estaré con contacto frecuente, compartiendo en tiempo real el acontecer cotidiano de actividades que realice.